Valentina pierde a su padre en un accidente. No conforme con la explicación de la muerte, lo busca en todas partes; al no encontrarlo, se vuelve una niña solitaria. Esta es la historia que la directora oaxaqueña Ángeles Cruz narra en su más reciente largometraje: Valentina o la serenidad, la cual tendrá su estreno internacional en el Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF, por sus siglas en inglés).
En la película, Ángeles Cruz aborda la pérdida de un ser amado desde la mirada de su propia comunidad de origen, Villa Guadalupe Victoria, donde lo habitual es guardar silencio: “A lo mejor en otras culturas lo resuelven con terapia, una fiesta o rituales. Para mí era importante entender que vengo de una cultura donde se habla poco y donde las cosas se entienden de otra manera. Todas las culturas tenemos distintas formas de acomodar el alma”.
Si bien la inspiración surgió a partir de una experiencia personal, Ángeles Cruz decidió no hacer de esta una película autobiográfica. A partir de fragmentos de su vida y de temores más recientes, pudo crear a Valentina y Pedrito, los personajes que en la ficción se enfrentan al dolor y la ausencia (interpretados por Danae Ahuja y Alexander Gabriel, respectivamente).
“Perder a mi padre a mis nueve años me impactó enormemente y cambió mi perspectiva del mundo. En 2020, debido a la pandemia, volví a sentir un miedo tremendo de perder a un ser querido. Este sentimiento se convirtió en el leitmotiv para escribir el guion de Valentina o la serenidad”, comparte la cineasta oaxaqueña.
Esta no es la primera ocasión en que la directora utiliza su lugar de origen como escenario de sus historias. Su largometraje anterior, Nudo Mixteco (2021), le permitió hacer una crítica al machismo y la misoginia que impera en este tipo de comunidades. Con Valentina o la serenidad explora un lado más íntimo y vulnerable de sus habitantes.
“Todo parte del lugar donde me desenvuelvo. Es compartir la parte humana. Que, en mi caso, es la comunidad de donde vengo. Aprender el lenguaje cinematográfico implica jugar con él desde lo que somos, nuestro barrio o nuestra comunidad”, explica la cineasta.
Para su realización, Valentina o la serenidad contó con el apoyo del Programa de Fomento al Cine Mexicano (Focine): específicamente, de la convocatoria para películas dirigidas a las infancias, así como del Estímulo a la Creación Audiovisual en México y Centroamérica para Comunidades Indígenas y Afrodescendientes (Ecamc).
Además de esta película, hay otras producciones mexicanas que tendrán actividad en el Festival Internacional de Cine de Toronto. Se trata de los títulos apoyados por el Estímulo Fiscal a Proyectos de Inversión en la Producción y Distribución Cinematográfica Nacional (Eficine): Memory, de Michel Franco, y A cielo abierto, dirigida por Mariana Arriaga y Santiago Arriaga. También se presentarán las cintas independientes El sabor de la navidad, de Alejandro Lozano, y The Dead Don’t Hurt, dirigida por Viggo Mortensen.
Cabe destacar que el estreno nacional de Valentina o la serenidad tendrá lugar en el marco del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), a realizarse del 20 al 29 de octubre de 2023.