Oficiales de Protección a la Infancia y Grupos Vulnerables, del Instituto Nacional de Migración (INM), dependiente de la Secretaría de Gobernación, trasladaron a la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, a dos personas menores de edad -un niño de tres años de nacionalidad estadounidense y una bebé nacida en México- para quedar bajo la tutela de la abuela materna.
Lo anterior, derivado de la determinación de la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia de Baja California Sur, México, y el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) del municipio de Los Cabos, en el sentido de que ambas personas infantes enfrentaban violencia familiar por parte de su mamá.
En el mes de septiembre de 2020, la Agencia del Ministerio Público de Atención Temprana del estado canalizó a las personas menores de edad a la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia, así como al DIF municipal, instancias que procedieron a la valoración médica, socioeconómica, psicológica y psiquiátrica de la madre.
Los resultados de los estudios efectuados, advirtieron la imposibilidad de una reunificación familiar en territorio nacional.
En coordinación con las autoridades consulares y los servicios de protección infantil de los Estados Unidos, se procedió privilegiar el interés superior de la bebé y el niño con el retorno asistido de los mismos, con el propósito de que su abuela se encargue de la tutela de ambos en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos.
El viaje inicial se programó para el mes de diciembre de 2020, pero se pospuso, por la contingencia sanitaria; el 14 de enero, previa valoración médica y al existir condiciones para ello, el INM a través de sus Oficiales de Protección a la Infancia y grupos vulnerables los trasladó -vía aérea- a la ciudad de Nueva York, donde agentes de la Custom and Border Protection (CBP) y personal del Servicios de Protección Infantil de ese país los recibieron, para luego llevarlos con su la abuela materna.
De esta manera, el INM refrenda su compromiso por la defensa y salvaguarda de los derechos humanos, así como su espíritu de colaboración con las diferentes instancias estatales y nacionales para hacer valer el interés superior de la niñez, sin importar su origen, condición social o económica.