A 65 años de la emisión del último número de la revista Arte público, editada por David Alfaro Siqueiros en la década de los cincuenta del siglo pasado, Proyecto Siqueiros: Sala de Arte Público – La Tallera, entidad perteneciente a la Red de Museos del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), presenta la primera de la nueva época de esta publicación, cuya finalidad es constituirse en una tribuna para la discusión de problemas artísticos y de lo público en este ámbito.
En el marco de la campaña “Contigo en la distancia” de la Secretaría de Cultura, se presenta este miércoles 7 de abril a las 18:00 horas la revista en formato digital, la cual se difunde como parte de Distancia crítica, programa de curaduría digital de Proyecto Siqueiros que da a conocer investigaciones y reflexiones en torno del legado estético, político y pedagógico del muralista mexicano.
En este caso, da continuidad a su trabajo editorial, aún poco explorado, pero que cultivó a través de la creación y edición de publicaciones periódicas, así como de su participación como consejero editorial, escritor, grabador, impresor, estratega de circulación e impulsor de políticas editoriales.
Arte público estará disponible para descarga o lectura en línea en la sección Distancia crítica (http://www.saps-latallera.org/saps/exposicion/distancia-critica), así como en http://bit.ly/3qWofiZ, en el sitio web de Proyecto Siqueiros (http://www.saps-latallera.org/saps/exposicion/distancia-critica) y en sus redes sociales.
Este número inaugural incluye nueve artículos y ensayos, agrupados en tres temas: la actividad editorial de Siqueiros, lo público y las imágenes en lo público, así como corporalidades, pedagogías y espacios. Reúne trabajos de la curadora e investigadora Gemma Argüello, Natalia de la Rosa, investigadora, docente y curadora; Tania Islas, docente e investigadora; Sebastián Rivera Mir, docente e investigador; Carlos Segoviano, curador e investigador.
Participan también Mónica Montes, responsable del Centro de Investigación y Documentación Siqueiros (CIDS); Adriana Melchor, curadora de la Sala de Arte Público Siqueiros; Silverio Orduña, curador de La Tallera; y Willy Kautz, director de Proyecto Siqueiros. Adicionalmente, se publican documentos e imágenes pertenecientes al acervo del CIDS. Christian Gómez funge como editor responsable.
Las publicaciones que impulsó David Alfaro Siqueiros fueron (en orden alfabético): Arte público, Contra-ataque, Documental, Frente a Frente, El Machete, Revista 1945 y 1946, y Vida Americana. Algunas de ellas fueron órganos de difusión de entidades gremiales fundadas y apoyadas por el artista; otras más tuvieron un carácter efímero o no se emitieron con una periodicidad establecida. Sin embargo, para él esos medios fueron tribunas, pues formaron parte de sus plataformas para difundir y debatir un ideario estético y político acerca de lo público.
En su texto Siqueiros, el mundo editorial y su noción de arte público, incluido en este número, Sebastián Rivera Mir señala que: “…entender la labor editorial de Siqueiros es también crucial para comprender la mayoría de los esfuerzos que se hicieron en este ámbito desde la izquierda mexicana y desde el Estado posrevolucionario. En otras palabras, difícilmente podemos analizar la destacada posición que llegó a desarrollar la edición mexicana en América Latina, sin sopesar la influencia que tuvo este artista en este espacio particular”.
El primer número de Arte público fue publicado por Siqueiros en octubre de 1952, con tres propósitos: reafirmar la significación histórica del Movimiento Mexicano de Arte Social, impulsar este movimiento al que consideraba una etapa más avanzada, la del realismo socialista en México; y transmitir las experiencias de esta manifestación al resto de las artes.
Como lo explica Mónica Montes en Arte Público, tribuna de pintores, escultores, grabadores, arquitectos, dibujantes, fotógrafos, camarógrafos y críticos de arte, con el cual abre el primer número de esta nueva época de Arte público, “en su momento la revista contó únicamente con dos números, además de un número extra, dos folletos y una hoja volante que circularon entre 1952 y 1956. En sus páginas se comentó la creación de Ciudad Universitaria, se abrió la discusión sobre el academicismo de la pintura soviética, el arte de contenido social que se desarrollaba en Francia, Italia, China y Brasil, así como el realismo en la cinematografía y la literatura. También se presentó un proyecto de clasificación de la crítica de arte en México, entre otros muchos temas.