El presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a las y los mexicanos a actuar con responsabilidad durante diciembre para evitar contagios de COVID-19 debido a que la epidemia continúa causando estragos entre la población.
En conferencia de prensa matutina dijo que mientras no exista una vacuna contra la enfermedad que causa el virus SARS-CoV-2, “lo mejor de todo, lo más eficaz, es cuidarnos nosotros mismos”.
Propuso evitar reuniones en este mes en el que tradicionalmente se realizan celebraciones como el día de la virgen de Guadalupe, las posadas, la Navidad, cenas o comidas de Fin de Año con compañeras o compañeros de trabajo, el festejo del Año Nuevo y en enero, la llegada de los Reyes Magos.
Reiteró que el Gobierno de la Cuarta Transformación no limitará las libertades, ni impondrá medidas coercitivas o toque de queda para impedir que la gente participe en encuentros, sino que apelará a la conciencia social.
“Puede parecer utópico, pero como siempre lo he dicho: ‘prohibido prohibir’. Creo más en la libertad y el convencimiento que en la imposición o en la fuerza. Además, me consta que el pueblo de México es responsable, educado y consciente”, subrayó.
En un documento dirigido particularmente a habitantes de la Ciudad de México, el jefe del Ejecutivo planteó un decálogo de responsabilidad frente al coronavirus.
Dijo que si no es necesario estar en el espacio público, las personas no salgan de sus hogares y si lo hacen, que procuren conservar la sana distancia.
Para mantener cercanía con los seres queridos, sugirió comunicarse por teléfono o videollamadas. En las festividades pidió solo convivir los que habitan en la misma vivienda y no hacer fiestas con familiares o amigos.
“Dejemos los regalos de navidad para otro momento. Recuerda: regala afecto, no lo compres”, expresó.
Si se presentan síntomas de la enfermedad —dolor de garganta, tos, fiebre, dolor de cuerpo o dolor de cabeza— pidió llamar de inmediato al 5658-11-11 en la Ciudad de México y al 911 en el resto de la República; a través de estas líneas telefónicas se canaliza a la atención médica.
Además, acudir oportunamente a la clínica, centro de salud o al hospital más cercano es fundamental, sobre todo si se padece hipertensión, diabetes, obesidad, entre otras enfermedades crónicas.
En la capital del país y algunas entidades federativas, dijo el mandatario, se instalaron kioscos en los que se realizan pruebas para detectar la presencia del virus.
Adelantó que en los próximos días se ampliará el número de camas, equipos y profesionales de la salud en la Ciudad de México con el objetivo de seguir garantizando la atención médica especializada y de calidad. En la segunda semana de diciembre podría haber 500 camas más en hospitales que ya están en funcionamiento.
Sostuvo que “lo más importante es que no nos enfermemos. Es mejor prevenir que lamentar. Estoy seguro que, como siempre, tomarás en cuenta nuestras recomendaciones. La autoridad somos todos. Nadie mejor para cuidarnos que nosotros mismos. Nada material es más importante que la vida”.
El mandatario confió en que las y los capitalinos, fraternos y respetuosos, ayudarán a controlar la epidemia tras este llamado.
Recordó que al empezar la pandemia todos contribuyeron a quedarse en casa durante la Jornada Nacional de Sana Distancia, con lo que se logró aminorar los contagios y que no se desbordara el sistema de salud como sucedió en otros países.
“Aquí, por el apoyo de toda la gente que se guardó voluntariamente, se pudo tener más camas, ventiladores, médicos, enfermeras y ningún enfermo se ha quedado sin atención y, repito, esto fue posible porque nos aislamos y nos cuidamos en familia, sobre todo, atendimos a los enfermos y a los adultos mayores”, remarcó.
El presidente exhortó a que se escuche el llamado a cuidarse; “es oportuno hacerlo”, enfatizó.