Identidad de mi tierra es el nombre del mural de 72 metros cuadrados creado en 2023 por Sergio Guadalupe Hernández Moreno, conocido como Serch, en la colonia Venustiano Carranza, del municipio de La Independencia, en el estado de Chiapas.
La obra fue financiada por el Museo Nacional de Arte Mexicano de Chicago y Portales del Arte en Chiapas, en la que el arquitecto, diseñador gráfico, pintor y muralista aborda la vida natural, la historia y haciendas, las cuales recrea con simbolismos y costumbrismo mexicano.
Para el artista, el propósito de dicho mural era “rescatar algunas vivencias, vestimentas, algunos colores y prendas de la región, que muy poca gente las sigue utilizando, así como algunos instrumentos de transporte, como la carreta, los bueyes, todo eso combinado con la geometría y como arquitecto”, explica.
Fundador de la asociación civil Portales del Arte en Chiapas, ha entablado lazos con el Museo Nacional de Arte Mexicano de Chicago y,actualmente, colabora en la restauración del Palacio de gobierno de Tuxtla Gutiérrez, además de participar, durante los últimos cinco años, en exposiciones colectivas e individuales.
En entrevista, refiere que también ha realizado trabajos de muralismo en el municipio de Suchiapa y, con algunos de sus compañeros integrantes de Portales del Arte en Chiapas, ha intentado sembrar la semillita en la comunidad “que está totalmente alejada, muy lejana en el sentido del arte y la cultura”.
Como parte de estas acciones de promoción del arte, en enero de este año, inició un proyecto de cursos de tres meses en la Escuela Telesecundaria “Francisco Javier Mina”, de la misma comunidad, en donde las y los alumnos debían realizar ocho murales cuyos temas se dividieron en abstracción geométrica y arte figurativo.
“En la parte de figurativo, plasmaron algunas vestimentas, los peinados, cómo se peinaban antes algunas muchachas cuando estaban en la edad de 14 y 15 años, la forma de la vestimenta, los zapatos; algunas frutas, verduras que se conocen y, en general, algunas tradiciones que con el paso del tiempo se fueron perdiendo”, comenta.
También se implementó un proceso de reflexión “puesto que, como jóvenes, están en un punto de no saber qué rumbo tomar; entonces es normal en la comunidad que, a los 15 años saliendo de la telesecundaria, piensen en casarse o tener hijos a temprana edad.
“Entonces, en la parte de la pintura también se encontraron con eso, lo plasmaron y algunos personajes que fueron importantes para ellos, como los abuelos, un tío, un ser querido. Fue un encuentro de muchas emociones, pero creo que fue un gran proyecto en el que participaron por lo menos 50 estudiantes”, agrega.