Diputadas y especialistas realizaron de manera virtual el “Simposio Infancia sin Chatarra”, cuyo objetivo es difundir por qué es necesario y viable para México implementar estrategias para que las y los niños no consuman chatarra.
La diputada Ana Patricia Peralta De La Peña (Morena) dijo que desde la Cámara de Diputados se han hecho esfuerzos, pero no han sido suficientes, por lo que es indispensable que el problema se vea de manera multidisciplinaria con metas y acciones específicas que garanticen el derecho a la salud, y se brinde información para una alimentación adecuada de las niñas, niños y adolescentes.
“Es increíble ver como cada vez niñas y niños, a más temprana edad, consumen comida chatarra como papas fritas, refresco, galletas, que afectan de forma grave su desarrollo”.
Señaló que a raíz de esta problemática surge la necesidad de impulsar una iniciativa que reforme las leyes General de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes; de Educación, y de Salud, con el fin de anteponer el interés superior de la niñez por encima de cualquier interés económico o industrial, y así promover una alimentación mucho más nutritiva y de calidad.
La también secretaria de la Comisión de Salud indicó que se debe fomentar de manera prioritaria, desde las escuelas, la educación nutricional y alimentaria, para crear buenos hábitos alimenticios a temprana edad.
En su intervención, la diputada Zulma Espinoza Mata (PVEM) consideró necesario promover espacios saludables dentro y fuera de las escuelas; hay que visibilizar esta problemática y desde la Cámara de Diputados dar grandes pasos en el tema.
Reiteró su compromiso por impulsar iniciativas para adecuar el marco jurídico y avanzar de manera contundente para que no estén en riesgo las niñas, niños y adolescentes.
La diputada Nayeli Arlen Fernández Cruz (Morena) señaló que el tema que hoy ocupa es el de la salud y, sobre todo, de los más pequeños. “Considero que desde el ámbito legislativo hemos dado grandes avances, como el etiquetado frontal y las propuestas de regulación de la comida chatarra para menores; no obstante, quedan retos por superar”.
Indicó que el objetivo es lograr una política integral de prevención de la obesidad que contemple la protección de los entornos escolares, restricción de la publicidad y patrocinio de alimentos de bajo nivel nutricional.
Especialistas coinciden en eliminar la comida chatarra
La directora de la organización Come con Ciencia, Celma Ochoa, dijo que México es uno de los principales consumidores de refresco y comida chatarra. Precisó que nueve de cada 10 niños y adolescentes consumen de manera cotidiana alimentos y bebidas azucaradas, así como comida con exceso de calorías, lo que les provoca enfermedades cardiovasculares o diabetes. Urgió a tomar acciones al respecto para mejorar la salud de las y los niños.
Gerardo Ortiz, coordinador de Programas Institucionales y maestro en Nutrición Humana por el King´s College London, manifestó que las niñas y niños no tienen la madurez necesaria para tomar decisiones; por lo tanto, es acertado limitar el acceso a productos que puedan tener un impacto negativo para su salud.
Mauricio González, médico internista, señaló que eliminar la comida chatarra de los menús de los niños es lo correcto. “No hay alternativas a esto: o las removemos o vamos a seguir siendo impactados por estas enfermedades que tanto nos aquejan; la batalla que deja más recompensa es eliminar los productos chatarra”.