Al iniciar la vacunación contra el virus SARS-CoV-2 a personal de salud de la Ciudad de México, Querétaro y el Estado de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador reafirmó el compromiso de garantizar a las y los mexicanos el derecho a la salud.
Reiteró que la vacuna será universal y gratuita; además, hay presupuesto suficiente para la adquisición de todas las dosis necesarias.
En conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional, el mandatario encabezó el enlace en vivo hasta las tres sedes de aplicación: el Hospital General de México Dr. Eduardo Liceaga en la Ciudad de México, el 4/o Regimiento Blindado de Reconocimiento de la 17 Zona Militar en Querétaro, y el Hospital Militar de Zona Santa María Rayón en Toluca, Estado de México.
La primera en recibir la vacuna fue la jefa de Enfermería de la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital ‘Rubén Leñero’, María Irene Ramírez, en la Ciudad de México. Atestiguaron este acto, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo; el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez; la secretaria de Salud local, Oliva López Arellano; la directora del Hospital General, Guadalupe Guerrero Avendaño y el coordinador de los Institutos Nacionales de Salud, Gustavo Reyes Terán.
“Hoy, 24 de diciembre, inicia la vacunación contra COVID-19 y cambia la fase, el manejo de la epidemia, con una luz de esperanza; hoy tenemos un instrumento de protección específica que se vuelve un mecanismo muy eficaz, potencialmente muy efectivo para darle la vuelta a la página a esta epidemia que nos ha causado tanto dolor. (…) Tenemos la esperanza de que con la vacuna contra el virus SARS-CoV-2 empezaremos a combatir de una manera mucho más efectiva a este terrible enemigo de la humanidad”, expresó el subsecretario.
Aclaró que este hecho no significa que la epidemia terminó, por lo que pidió a la población mantener la sana distancia, el aislamiento físico en espacios públicos, el lavado de manos y uso de cubrebocas en lugares cerrados como medidas para prevenir contagios.
En Querétaro, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo Aburto, acompañó a María del Rosario Lora López, enfermera especialista del Hospital ‘El Marqués’ en esa entidad federativa.
En Toluca, Estado de México, se vacunó al mayor médico cirujano, jefe de Asistencia Interna del Hospital Militar de zona, Daniel Díaz Domínguez.
Este día comienza el operativo de vacunación con 2 mil 975 trabajadores de la salud que en las unidades COVID estén cercanos a los pacientes, es decir, personal de enfermería, inhaloterapia, medicina, laboratorio, limpieza, ambulancia y manejo de alimentos, así como radiólogos, camilleros, asistentes médicos y trabajadores sociales.
También se incluirá a pasantes, residentes, personal de confianza, de base y eventuales.
El jefe del Ejecutivo reafirmó que se aplicará la vacuna con prioridad a las y los trabajadores de salud que están al frente de la emergencia sanitaria porque son quienes arriesgan la vida para salvar la de otras personas.
El personal fue identificado a partir de un registro de las principales instituciones: Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Secretaría de Marina (Semar) y Petróleos Mexicanos (Pemex).
La vacuna de Pfizer es de doble aplicación. Quienes la recibieron hoy, deberán recibir la segunda dosis en 21 días.
Este hecho, dijo el presidente, reafirma el acuerdo que el Gobierno de México estableció con esa empresa. Al mismo tiempo se establecieron acuerdos con otras empresas, lo que asegura la disponibilidad de vacunas para la población.
“Aclarar que va a ser en todo el país y cuando tengamos un poco más de seguridad sobre la disponibilidad de la vacuna, se va a presentar un plan sobre los grupos de atención preferente para que todos los mexicanos tengamos una idea de cuándo nos va a tocar”, enfatizó.
Los siguientes en recibirla, precisó, serán los adultos mayores de 65 años en adelante, seguido de las personas con enfermedades crónicas. Posteriormente, maestras y maestros de estados en semáforo verde donde hay condiciones para regresar a clases presenciales.
El secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela, informó que tras la llegada de las primeras vacunas, estas permanecerán custodiadas por personal de las Fuerzas Armadas en el Instituto Nacional de Cancerología.
El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, destacó que México es el primer país en América Latina que accede a la vacuna contra COVID-19.
Explicó que la logística de arribo de las vacunas de Pfizer se planeó en función de los requerimientos de hipercongelación. Las siguientes 50 mil vacunas de este tipo llegarán el martes 29 de diciembre.
La meta es contar con un millón 420 mil 575 vacunas de Pfizer para trabajadores de la salud en enero y llegar a los 34 millones 400 mil vacunas de esa misma empresa en diciembre de 2021.
Resaltó que AstraZeneca espera obtener su autorización para uso de emergencia en Europa en las últimas semanas de enero de 2021. México precompró 77.4 millones de dosis a envasar en el país.
La vacuna de CanSino BIO someterá su expediente al análisis de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y, durante enero, el primer corte de su fase III para solicitar su autorización de uso de emergencia.
La iniciativa multilateral COVAX anunció que el pasado 18 de diciembre tendría posibilidad de ofrecer a los participantes dosis para el 3 por ciento de su población durante el primer cuatrimestre de 2021. México precompró 51.5 millones de dosis.
“No dependemos solo de una. (…) México tuvo acceso en tiempo y forma como lo pidió el presidente de la República. Tenemos un portafolio que va a permitir que el plan de vacunación que diseñó el doctor Alcocer y su equipo, se lleve a cabo en tiempo y forma con los periodos programados”, subrayó el canciller.
Acompañaron al presidente en el Salón de la Tesorería, los secretarios de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval y de Marina, José Rafael Ojeda Durán, y el director general del Instituto de Salud para el Bienestar, Juan Antonio Ferrer Aguilar.