La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural informó que la miel melipona y productos acuícolas fueron incorporados en los procesos de certificación orgánica, con base en la actualización de los Lineamientos para la Operación Orgánica de las actividades agropecuarias, que entró en vigor el pasado diciembre, y que benefician a más de 50 mil productores orgánicos, principalmente de mediana y pequeña escala.
Con el objetivo de precisar las actualizaciones al marco regulatorio, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) realizó la videoconferencia “Acuerdo por el que se dan a conocer los Lineamientos para la Operación Orgánica de las actividades agropecuarias”.
En la charla participaron productores, operadores, procesadores, fabricantes de insumos, comercializadores, sistemas de certificación orgánica participativa, organismos de certificación, entidades de acreditación y representantes de Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea y de la Comisión Interamericana de Agricultura Orgánica (CIAO), integrada por 19 países.
El director de Inocuidad Agroalimentaria del organismo de Agricultura, José Luis Lara de la Cruz, precisó que las modificaciones al marco regulatorio atienden necesidades propias del sector orgánico y robustecen la operación nacional con nuevos sistemas productivos, como la acuacultura, los contenedores para la producción no ligada a suelo y la producción de miel melipona.
Destacó que los nuevos lineamientos contribuyen a ampliar la oferta de productos orgánicos en nuestro país y consolidar la confianza de los consumidores, al mismo tiempo que posicionan a los productos mexicanos en los mercados nacional e internacional.
La subdirectora de Autorización y Aprobación de Organismos de Coadyuvancia del Senasica, Aurora Lobato García, explicó que una de las modificaciones más relevantes es la excepción que se establece para la producción no ligada al suelo, que permitirá la certificación de contenedores, que incluyan en su plan orgánico información técnica en materia de sustratos y uso de plásticos clorados.
Respecto a la acuacultura, comentó que los organismos interesados en certificar la producción acuícola, deberán presentar una solicitud ante el Senasica, en virtud de que se trata de un sistema productivo nuevo y requiere competencias técnicas especializadas, diferentes a los sistemas pecuarios que ya operaban.
Agregó que en materia de etiquetado se hicieron precisiones para dar la opción al productor y procesador de incluir la leyenda “Libre de organismos genéticamente modificados” o “Producido sin OGM”.
Otra innovación relevante, dijo, son los criterios para inspección y certificación. Se incluyó un apartado de análisis de riesgo para que las inspecciones estén dirigidas a hacer más eficiente el trabajo de los organismos de certificación, sin que ello implique mayores costos para los operadores.
Estos análisis permiten clasificar las operaciones en función del riesgo de perder la integridad orgánica, ya sea por factores de producción, por los insumos utilizados o por riesgos en el procesamiento y la comercialización.
Desde la primera publicación del Acuerdo que modernizaba los Lineamientos para la Operación Orgánica de las actividades agropecuarias, el pasado 8 de junio, el Senasica organizó 16 videoconferencias especializadas dirigidas a los sectores que componen la cadena orgánica nacional y los principales socios comerciales de México en la materia. Los foros virtuales han sido visualizados por más de 23 mil personas.
La actualización de este instrumento normativo se deriva del trabajo coordinado entre la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, el Senasica, los organismos autorizados de certificación y el sector productivo, los cuales integran el Consejo Nacional de Producción Orgánica.