El Gobierno de México repatrió hoy los cuerpos de 15 guatemaltecos que fallecieron en un lamentable accidente en Chiapas el pasado 9 de diciembre y que fueron identificados recientemente. Estas acciones forman parte de los compromisos asumidos por las autoridades mexicanas en el marco de las actividades del Grupo de Acción Inmediata (GAI) contra la red de traficantes de personas responsables de esta tragedia.
Los cuerpos de los fallecidos fueron trasladados a la Ciudad de Guatemala en un avión Casa C-295 de la Fuerza Aérea Mexicana y entregados a funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores de ese país. El operativo fue coordinado entre la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), el Instituto Nacional de Migración (INM), dependiente de la Secretaría de Gobernación, la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA).
Las autoridades forenses de la FGR han logrado a la fecha, y con el apoyo de los gobiernos de los países de origen de los fallecidos, la identificación de 50 personas que murieron en el accidente (37 de Guatemala, 11 de la República Dominicana, 1 de El Salvador y 1 de Ecuador). De estos, 25 ya han sido trasladados a sus lugares de origen y 5 más serán transportados en el transcurso del día.
Por parte de la SRE dos funcionarios acompañaron el vuelo de repatriación de los cuerpos. La directora ejecutiva de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID), Laura Elena Carrillo Cubillas, y el director Carlos Imanol Belausteguigoitia, en representación del subsecretario para América Latina y el Caribe, hicieron entrega de los restos humanos a las autoridades guatemaltecas.
Como parte del apoyo a los familiares de las personas que perdieron la vida, el INM cubrió todos los gastos generados por los servicios funerarios.
El Gobierno de México y los países que integran el GAI refrendan su compromiso para continuar trabajando de manera conjunta en la atención a los afectados en este lamentable accidente, así como para unir esfuerzos a fin de desarticular la operación de las redes de traficantes de personas y otros delitos conexos del crimen organizado trasnacional.