Con el objetivo de incrementar el valor agregado en la producción rural y posicionarla en los mercados nacional e internacional, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural promueve en el sector agroalimentario la realización de estudios para crear marcas colectivas, indicaciones geográficas y denominaciones de origen.
Con estas acciones, Agricultura también impulsa el turismo gastronómico y agroturístico en regiones con productos originarios, donde los visitantes tienen oportunidad de degustar platillos típicos regionales elaborados a base de ingredientes provenientes de cultivos endémicos.
Del 25 al 28 de julio, Agricultura, en colaboración con el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), llevó a cabo el taller sobre derechos colectivos en materia de propiedad industrial, en el que brindó información y un panorama sobre la protección de productos a través de denominaciones de origen, indicaciones geográficas, marcas colectivas y certificación.
La denominación de origen y la indicación geográfica son bienes de dominio del poder público de la Federación y se reconocen a través de una declaratoria de protección emitida por el IMPI, con lo que se protegen productos agroalimentarios y manufacturados, destacó Agricultura.
México cuenta con 18 denominaciones de origen: Ámbar de Chiapas, Arroz de Morelos, Bacanora, Cacao Grijalva, Café de Chiapas, Café Veracruz, Café Pluma, Charanda, Chile de Yahualica, Chile habanero de Yucatán, Mango Ataulfo de Soconusco Chiapas, Mezcal, Olinalá, Raicilla, Sotol, Talavera, Tequila y Vainilla de Papantla, detalló
Expuso que las indicaciones geográficas identifican productos cuyas características son otorgadas por las cualidades naturales del medio geográfico donde se produce.
A pesar de que en otras zonas se encuentren productos del mismo género, la indicación geográfica asegura que el nombre del lugar que complementa la identificación del producto vaya acompañada de características particulares y exclusivas, explicó la dependencia.
Durante las cuatro jornadas del taller se fomentó la creación de estrategias para el desarrollo de capacidades de las comunidades indígenas, aplicación de regulaciones en casos de protección de la propiedad industrial y promoción de la organización de grupos de productores y artesanos para proteger sus derechos de propiedad industrial.
Además, se dio a conocer el papel del IMPI como la institución encargada de proteger la propiedad industrial y promover el desarrollo económico, generar empleos, valor agregado en los productos y servicios que se comercializan, mediante el registro de marcas, avisos comerciales, nombres comerciales, patentes y modelos de utilidad.
Sobre las denominaciones de origen, el IMPI destacó que el sistema de propiedad industrial en México protege la elaboración de productos a partir de métodos tradicionales, vinculados a las costumbres de zonas geográficas delimitadas y que se caracterizan por contener una importante carga histórica y cultural.
El evento se llevó a cabo de forma virtual y en cuatro días reunió a más de 200 asistentes provenientes de las secretarías estatales de Desarrollo Agropecuario y Desarrollo Económico; funcionarios del Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS) y del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), especialistas del Colegio de Postgraduados (Colpos) e integrantes de Sistemas Producto y productores del sector agroalimentario.