Dr. Rogelio Díaz Ortiz
El próximo fin de semana se realizará en Yakima, Washington USA una edición más del evento de promoción turística y gastronómica denominada “Noche de Agave”.
El evento será digno marco para conmemorar el vigésimo cuarto aniversario de la firma de hermanamiento entre la capital michoacana y la ciudad de Yakima.
De manera contundente puedo afirmar que el “hermanamiento” con Yakima es el más proactivo, útil y trascendente que tiene Morelia, vale la pena mencionar que es el único en el que aún participo de forma activa.
Vale la pena destacar que durante 30 años he participado en el programa de Ciudades Hermanas, entendiendo que este requiere de Tiempo para darle mantenimiento al proceso, es decir para visitar o recibir a quienes integran el Comité Ciudadano; Dinero para ambas cosas; Responsabilidad para entender que en el programa se “despersonaliza” a la representación para empoderar a la Ciudad representada; Identidad para magnificar coincidencias; Humildad para intercambiar experiencias exitosas en órdenes de gobierno, cultura, deportes, tecnología, negocios, academia, ecología y cualquier otra actividad de interés; Riesgos en materia de percepción y expectativas creadas.
Con emoción recuerdo que por instrucciones del alcalde de Morelia atendí la visita de la representación de Yakima, Washington creándose un fuerte vínculo de identidad con Noé Gutiérrez y Margarita Loera, al cual, con el transcurrir del tiempo y la contundencia de las acciones, se han agregado eslabones de intenso y fructífero trabajo, mutuo reconocimiento y de sólida amistad.
Vale la pena recordar que el 75% de la población que habita el Valle de Yakima es de origen latino y de este sus dos terceras partes provienen de Michoacán.
Este hermanamiento surgió con el alcalde de Morelia, Salvador Galván Infante, quien apoyó la iniciativa de los michoacanos avecindados en aquellas latitudes, magnificando coincidencias, pertenencia e identidad.
Han sido recurrentes las visitas al Valle de Yakima y muy gratas las recepciones que hemos hecho a la delegación que nos ha visitado, agregando en cada evento sólidos eslabones de identidad que han trascendido tiempo, distancia, idioma, siglas y colores.
En cada visita recibimos nuevas sorpresas, inmejorables atenciones, manifestaciones de cariño y evocación por Michoacán y México, oportunidades para presumir nuestras tradiciones, majestuosidad arquitectónica, potencial de inversión, capital turístico, riqueza artística y cultural.
El trabajo realizado por el Comité de Ciudades Hermanas Yakima – Morelia se ha visto expresado, a lo largo de los años, por una intensa y permanente campaña de promoción turística de Morelia, la donación de uniformes y varios Camiones de Bomberos, sillas de ruedas, bastones, material ortopédico, capacitación en materia de protección civil, intercambio de artistas locales, directores de orquesta sinfónica y estancias de corte académico.
Dedicando tiempo, intención, recursos y emociones a compartir la diversidad cultural a través de interacciones en áreas sociales, culturales, artísticas, económicas y educativas.
Polo Aguilera y su familia, Juven García, Mathew Tomaskin, Antonieta, Jovita, Grace, Ismael, Claire, Phil, Tory, Deborah, Charlie Robins, David Lynx, David Blink, Chuk y muchos más han formado parte de este relato de amistad.
Es justo destacar que desde su inicio y hasta el momento actual mis hoy “hermanos” Margarita Loera y Noé Gutiérrez son parte fundamental del hermanamiento, jamás han perdido el entusiasmo ni el deseo de mantener unidos a Morelia y a Yakima.
Gracias a su entusiasmo e indeclinable amor por Morelia ni siquiera la pandemia ha podido minar su permanente “exploración” para encontrar posibilidades de promoción, apoyo e intercambio entre Yakima y el Estado de Washington con la capital michoacana.
Mención especial merece la participación de integrantes de la Nación Yakama, prospera reserva india que ha encontrado similitudes con la Nación Purépecha y aspira a en algún momento oficializar un hermanamiento entre ellas.
Por parte de Morelia, a lo largo de los 24 años de vigencia del hermanamiento ha sido fundamental la participación de los integrantes de la Fundación Génesis, en algunos momentos de las Universidades La Salle Morelia, Latina de América y Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, el CONALEP Michoacán, el Conservatorio de las Rosas, la Cámara de Comercio, el Consejo Coordinador Empresarial, el Consejo de la Ciudad y el Ayuntamiento de Morelia.
Gracias a la gestión y trabajo conjunto se ha llevado a Yakima el talento artístico de músicos y artistas plásticos, académicos, empresarios y deportistas, además de realizar la donación de un busto en bronce de Don José María Morelos y Pavón al que se le ubico en un lugar de privilegio en el centro de Yakima.
En los últimos tres años las visitas en ambas latitudes se suspendieron por motivo de la pandemia, pero esto no ha impedido que en Yakima se sigan realizando actividades como la “noche de muertos”, presentaciones de artistas michoacanos, la “noche de agave” y la habitual promoción turística de Morelia.
Actividades y compromisos pre establecidos me impiden estar presente en la edición de este año de la “Noche de Agave”, pero desde el fondo del corazón les recuerdo con cariño, respeto y gratitud.
Sirvan estas líneas como un humilde testimonio de amistad y como un público reconocimiento a todos quienes de manera desinteresada suman ilusión, trabajo y recursos para que el programa de ciudades hermanas no muera.