Mañana será el último día del presidente Andrés Manuel López Obrador, toda una vida dedicado a la política, al servicio, un verdadero luchador social, que entregó todo, que fue honesto a carta cabal, incorruptible.
Nadie como él, que puso primero a los pobres, primero a los adultos mayores, primero a los jóvenes, primero el medio ambiente, aún que le faltó el Lago de Cuitzeo.
Que Dios le dé mucha vida, para que disfrute todo lo que dio a México, recibió un México en bancarrota, postrado, privatizado, saqueado, con el segundo lugar en corrupción y aún hay gente que defiende los gobiernos neoliberales.
Se le acusó de todo, desde que era un peligro para México, que iba a implementar un nuevo Venezuela, que se iban acabar las libertades, la democracia en México, que el peso se iba a devaluar, que iban a subir los energéticos, hasta un presidente narco.
Le robaron la Presidencia de la República en el 2006, Felipe Calderón, pero nada, nada lo detuvo, nada lo hizo flaquear, nada o desanimó. Como los grandes, los que hacen historia con letras de oro, llegó y cambió al país.
No hay un país en el mundo con mayor perspectiva de desarrollo que México, los logros del presidente Andrés Manuel López Obrador son innumerables, en el rublo que se tome, salarios los subió como nunca, como nadie más del 150 por ciento en 6 años, aumentó las pensiones de los trabajadores, miles de trabajadores, maestros, personal de salud fue basificado.
Paró el aeropuerto en Texcoco, ahí se veía lo que iba a venir, hizo el aeropuerto Felipe Ángeles, el de Tulum, la refinería de Dos Bocas, el Tren Transístmico, el Tren Maya, más de 1,500 kilómetros de vía, 5 Estados, compró una refinería en Estados Unidos, cambió el sistema de salud, aunque los detractores sigan con sus mentiras, los hechos hablan.
Hizo el Tren Insurgente, presas, autopistas, carreteras, hospitales, creó el programa la Escuela es Nuestra y la Clínica es Nuestra y a los Comités Vecinos les llega el recurso directo para sus mejoras.
Entregó como nunca recursos a los Estados, aquí a Michoacán más de 11 mil millones de pesos, que el Gobierno del Estado los aplicó en restaurar las carreteras estatales.
Y las pensiones que llenan de bienestar a los millones y millones de mexicanos a través de la pensión de adultos mayores que aumentó, las becas a los estudiantes, a las personas discapacitadas, a las madres solteras; 6 millones mexicanos salieron de la pobreza, cuando año tras año, aumentaba la cifra.
Todo eso y mucho más sin endeudarse, aunque los fanáticos de las mentiras digan lo contrario, sin endeudarse y con una pandemia.
No por nada el presidente está en el 80 por ciento de aceptación de todos los mexicanos y mexicanas, las mentiras no pudieron con los hechos.
México aunque sabe que el presidente merece un descanso, como nunca mañana será un día de tristeza, de muchas lágrimas, porque el presidente se va, quiere descansar, se va a retirar de la política, aunque los eternos detractores digan lo contrario, él ya dijo que no va a recibir a nadie, que no va hacer ninguna declaración, no va aparecer en ningún medio, va a estar en su rancho, escribiendo y dice que en 4 años estará listo su libro, que seguro será el mayor éxito literario como lo es su libro “¡Gracias!”, el libro mayor vendido en la historia del país.
Y como dice el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, el más nuevo morenista,
larga vida al compañero presidente. ¡Hasta siempre señor presidente!.