Durante el acto protocolario, el autor señaló que la comedia del arte es una lucha de clases e indicó que “una de las virtudes de la comedia del arte es que va más allá de la realidad, hacemos que los débiles triunfen, que los débiles ganen.
“Los actores de comedia del arte bordan al personaje por medio de rutinas perfectamente entendidas, practicadas y sabidas de memoria, son unos improvisadores, mas no unos improvisados, puntualizó.
En su participación, el director, escritor y dramaturgo Alejandro Licona recomendó el libro a todos los estudiosos al considerar que “es una oportunidad de conocer la comedia del arte, la cual ha caído en el olvido. La última vez que vi una comedia del arte fue en 1976 en la Escuela Nacional de Arte Teatral (ENAT) y quedé impresionado de lo divertido, de lo majadero y de lo vulgar; me sentí muy identificado”.
A su vez, el director, poeta y actor Roberto Vázquez Montoya indicó que el libro tiene una peculiaridad, la cual va más allá de ser un solo documento histórico, porque abona en el sentido de la técnica y en el sentido de la plástica y tiene que ver con algo muy importante, como lo es la disciplina.
La ilustración del libro estuvo a cargo de Gala Pomma; la edición de Carmen Luna y Jessie Garibay; prólogo de Laura Aragón y de Augusto Albanez; fotografía de Audrey Hazel Franco Coops y formato de Edición Kindle.