En México existen diversas especies de pescados disponibles para su consumo durante el todo el año, a precio accesible, y con nutrientes como proteínas, vitaminas y aceite omega, que fortalecen el sistema inmunológico, informó la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural.
Se trata de pescados y mariscos que están disponibles de forma permanente en los centros de abasto, aun y cuando haya veda pesquera, debido a que se producen de manera regular por acuacultura o maricultura y a que la cadena productiva del ramo cuenta con sistemas de conservación.
La Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) explicó que estas especies son producidas mediante acuacultura, que consiste en el cultivo y producción de organismos acuáticos de agua dulce o salada.
Indicó que el camarón que se produce en granjas acuícolas se puede consumir los 12 meses del año, y se produce en estados como Sonora, Sinaloa, Nayarit y Guerrero, entre otros.
Otra especie que está disponible a lo largo del año es la tilapia, la cual se produce en la mayor parte de los estados del país y su costo promedio es de 55 pesos el kilogramo, destacó.
La trucha se produce también durante los 12 meses en entidades como Puebla, Tlaxcala, Hidalgo, Ciudad de México, Morelos y Guanajuato, y su precio comercial promedio rebasa los 100 pesos el kilogramo, resaltó la dependencia.
El ostión se cosecha en estados como Baja California, Baja California Sur, Campeche, Sonora, Sinaloa, Nayarit, Tabasco y Tamaulipas, mientras que el bagre, que se cultiva en Jalisco, Michoacán y Tamaulipas, tiene un costo regular de 110 pesos el kilogramo.
La carpa es otra de las especies que se puede consumir en cualquier época del año, se produce en estados como Puebla, Tlaxcala, Hidalgo, Ciudad de México, Morelos, Guanajuato y Querétaro, y tiene un costo promedio de 35 pesos por kilogramo.
El pescado posee vitaminas del grupo B, como B1, B2, B3 y B12, y liposolubles, entre las que destacan las A, D y, en menor proporción, E, presentes en el hígado de los blancos y en la carne de los azules, principalmente.
Las vitaminas A y E poseen acción antioxidante, es decir, constituyen un factor protector frente a ciertas enfermedades degenerativas, cardiovasculares y cáncer.
El contenido calórico de los pescados es bajo y oscila entre 70 a 80 kilocalorías en los magros y 120 a 200 kilocalorías en los grasos o azules por cada 100 gramos, por lo que constituyen una buena opción de alimentación.
Además, en estos productos se encuentran todos los nutrientes implicados en el crecimiento y desarrollo: proteínas, ácidos grasos, omega-3, calcio, hierro, zinc, yodo y ácidos grasos poliinsaturados.