El día de ayer la agencia calificadora Fitch Ratings ratificó la calificación crediticia de México en “BBB-” con perspectiva estable, lo que indica que la calificación se mantiene en la categoría de grado de inversión.
En su comunicado, Fitch destaca que “el marco de políticas de México sigue siendo una fortaleza” y que en su evaluación abonó a la calificación “el historial de políticas macroeconómicas prudentes, creíbles y consistentes”, lo que refleja una sólida capacidad y flexibilidad institucionales.
El compromiso del Gobierno de México con la prudencia fiscal y las acciones que ha llevado a cabo para mejorar el marco de administración tributaria han contribuido a contener con éxito los desbalances económicos. De acuerdo con la agencia, en 2020 México registrará uno de los menores déficits entre los países con calificación crediticia “BBB”, lo que respalda la perspectiva estable.
La ratificación de Fitch se da dentro de un contexto de ajustes de calificación sin precedentes, en el que las agencias calificadoras han tomado acciones negativas sobre más de 100 soberanos a nivel mundial desde el 9 de marzo, y alrededor de un tercio del portafolio de Fitch tiene perspectiva negativa.
El Gobierno de México mantiene su compromiso con políticas y marcos institucionales de políticas sólidos, respaldados por una gobernanza y transparencia efectivas y guiados bajo el principio de no corrupción. Esto permitirá que el país siga manteniéndose resiliente ante el desafiante contexto económico mundial.
Las medidas implementadas para favorecer la reactivación de la economía, dentro de un ámbito de prudencia fiscal, están apoyando la recuperación económica. Al mismo tiempo, el trabajo con el sector privado para reactivar la inversión y el ahorro, así como los acuerdos comerciales estratégicos, ayudan a impulsar el crecimiento del país. Como muestra de lo anterior están el anuncio reciente de un primer paquete de proyectos de infraestructura por 1.3% del PIB, la reforma de las pensiones y la entrada en vigor este año del Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá.
México también se beneficia de mercados de capital profundos y desarrollados, una cobertura petrolera bien ejecutada, un tipo de cambio flexible y acceso a la Línea de Crédito Flexible del Fondo Monetario Internacional, los cuales representan ventajas comparativas importantes ante la coyuntura actual.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público refrenda su compromiso con la prudencia fiscal y políticas macroeconómicas sólidas, que abonen a una reactivación económica sostenida.