Alfredo Gallegos “Padre Pistolas”
-Predicar la doctrina de Cristo siempre trae controversia, pleitos y muchas veces significa
persecución y arriesgar la vida, tanto con la familia como con la sociedad y las autoridades, sin embargo cuando uno sabe que, Dios Padre nos acompaña y nos apoya es fácil superar todos los obstáculos.
-Estamos acostumbrados a preferir y amar a papás, hijos, esposas, amigos, dinero, propiedades, vicios, etc., antes que a Dios, lo digo porque nuestro tiempo, está encaminado a ellos y hasta después dedicamos tiempo y cariño a Cristo, a su misa, pláticas
y limosnas.
-Pero ahora sale Cristo que tenemos que preferirlo antes que a nuestros padres, hijos, hermanos y las cosas de este mundo si no, no seremos dignos de su amistad, esto no es por amor propio de Cristo, de un egoísmo, sino que es real, a él le pertenecemos y lo demás es lo de menos.
-Tenemos que preferirlo a nuestra propia vida, porque tenemos que preferirlo a él más que a nosotros mismos, dice: “El que salve su vida la perderá y el que la pierda por mí la
salvará”.
-Con tanta violencia en nuestro país, tanto secuestro, extorsión y robo y lo peor ya han asesinado a nuestro pariente y todavía siguen pidiendo el rescate, si no les muestran vivo a
su pariente aunque sea a 100 metros de distancia no les den ningún centavo.
-El mismo Cristo, los apóstoles y todos los mártires le encuentran un sentido al sacrificar su vida, lo que no tiene sentido es tanta muerte violenta de sicarios y narcotraficantes que no respetan nada ni a nadie, incluyendo mujeres y niños todos los días, reflexionemos que hay algo que hemos hecho que está muy mal y nos va a dar trabajo corregir.
-“Quien no toma su cruz y me sigue no es digno de mí”, dice Cristo y no se refiere a la cruz más difícil, él escogió esa cruz de madera de donde colgó para salvarnos del pecado, sino
de la cruz diaria: Trabajar para mantenernos, el hijo vicioso, la mujer celosa, las enfermedades, los bajos salarios, los gobernantes ratas, los ladrones, las suegras y en fin, cada quien tiene una cruz diferente en la rutina diaria.
-Podemos tomar esa cruz voluntariamente, con alegría, como los ladrones y el Cireneo a güevo, y de mala gana y como Gestas maldiciendo y camino al infierno.
-La cruz es señal de amor por parte de Dios, quién más que Cristo, la Virgen y los apóstoles sufrieron y nosotros queremos ser seguidores de Cristo pero sin sufrir y sin morir.
-Ser hospitalarios tiene su recompensa, aunque sea con personas indeseadas.
-Llega un señor a su casa y encuentra a su mujer en plena acción con su amante.
-Vieja mentirosa y traicionera, te voy a matar.
-El traicionero y mentiroso eres tú, diario que estás en juntas con tu jefe, y míralo aquí está conmigo.
Que Dios los bendiga.